Caldito de Marisco en Casa: Aprovéchalo al Máximo con un Toque de Sabor Real.
Si quieres hacer un caldito de marisco en condiciones, necesitas un montón de cabezas de gambas y langostinos, esos son los que le dan el sabor real. Así que, mi consejo, guárdate esas cabezas en un tupper o una bolsa de congelación hasta que tengas una buena cantidad, NO las tires, Aprovetxalas¡¡. En cuanto a las patas, peladuras y cáscaras, mejor tíralas, no aportan mucho y solo ocupan sitio en el congelador.
El marisco, como el salmón y las sardinas, es una rica fuente de ácidos grasos omega-3, fundamentales para la salud cardiovascular al reducir la inflamación y mejorar los niveles de colesterol. Además, la variedad de proteínas magras presentes en gambas, cangrejos y mejillones es esencial para el desarrollo y la reparación de tejidos, manteniendo tus músculos en excelente forma.
También son una potencia de vitaminas y minerales, incluida la vitamina B12 esencial para la función cerebral y el zinc clave para el sistema inmunológico.
Además de sus beneficios físicos, el marisco puede tener un impacto positivo en tu bienestar emocional. ¿Y sabías que algunos mariscos, como las sardinas, pueden ser aliados para mantener una buena salud ocular gracias a su contenido de vitamina D y omega-3?
¡El marisco no solo es un placer para el paladar, sino también un regalo extraordinario para tu bienestar!
CALDO DE MARISCO "A LO POBRE"
Ingredientes
- 25 piezas aprox cabezas de gambas y langostinos
- 1 litro y medio de agua
- 1 cucharada de sal
- 1 zanahoria
- 1 puerro
- 1 tapón de coñac opcional
- 2 cucharadas soperas de aceite de oliva extra para dorar las cabezas
Paso a paso
- En una sartén grande, calienta el aceite de oliva , agrega las cabezas de gambas y langostinos. Doralas a fuego medio, y aprovecha para presionarlas ligeramente para que suelten sus jugos internos.
- Opcionalmente, para darle un toque especial, puedes flambear las cabezas añadiendo un tapón de coñac y encendiéndolo con cuidado y dejando que la llama se extinga sola. Esto aportará un sabor ahumado. (Es muy importante saber que siempre que flambees apagues por completo la campaña extractora y tengas a mano una tapa)
- Una vez doradas las cabezas, añade medio litro de agua a la sartén para desglasarla. Obtendras un caldo jugoso que tendras que verter en una cazuela grande.
- Agrega un litro de agua y una cucharada de sal a la cazuela. Esta cantidad será suficiente para obtener un litro de buen caldo.
- Cuando el agua comience a hervir, añade la zanahoria, lo verde de un puerro y, si lo deseas, un puñado de verduras deshidratadas para refrescar el caldo resultante.
- Durante la cocción, es posible que se forme espuma en la superficie del caldo debido a las impurezas. Utiliza un cacillo para retirarla y así dejar el caldo limpio y apetecible.
- Cocina a fuego medio durante unos 45 minutos, asegurándote de que el caldo no hierva en exceso.
- Finalmente, cuela el caldo de mariscos para separar las cabezas y las impurezas.