Hacemos un paquetito con todas las hierbas juntas y se ata con un hilo de algodón de cocina.
Disponemos una hoja de la mazorca en vertical y encima otra en horizontal, o al revés. Colocamos el paquetito de hierbas en el medio y los granos de pimienta. Se doblan las hojas hacia por encima y al rededor del paquetito de manera que quede bien envuelto.
Para acabar, lo atamos bien con otro trozo de cordón para cocina y dejamos uno de los cabos un poco más largo para luego poder sacarlo facilmente de la sopa o el caldo en donde lo vayas a meter.